Hace unos días creí que lo que estaba viviendo era real. Después de un largo paseo por el parque con los bebes, me alisté y salí a relajarme de todo el estrés de la semana. Estaba tranquila, en el fondo sabía que los había dejado en muy buenas manos, no tenía clara la idea de quién era el que quedó a cargo pero estaba tranquila y segura. Eso era raro, pero primordial en ese momento: tranquilidad.
Pasó algo que me estresó, no recuerdo bien qué fue pero creo que debía volver a la casa por alguna importante razón. Entré y subí corriendo las escaleras, no recuerdo muy bien ese momento pero entré al cuarto de mi mami y me tiré a la alfombra como siempre a jugar con los bebes. Vi una persona al lado de mi mami y sorprendida dije: "papi????" Y claramente me dijiste "claro pues, quién más va a ser?". Era algo imposible, pero se sentía real, repetí una y otra vez: "Papi? De verdad eres tú? Pero... no entiendo! Eres tú??? De verdad estás aquí?".
Difícil de explicar, pero aún lo recuerdo y mi corazón vuelve a latir a mil por hora pensando que esta vez sí sería para siempre. Luego le dije sin parar: "Pero ahora sí es cierto? Ahora sí estás aquí para quedarte?". Te quedaste callado y miraste a un lado sin decirme nada. Fue como si todo se hubiese transformado en una amarga y oscura pesadilla. Cuestioné una vez más porque venías y te ibas así como si nada, porque no de una vez por todas decidías a donde pertenecer. Me molesté, lloré y grite mientras tú te ibas. Mientras tanto, despertaba a otra realidad con las mismas lágrimas que hacía segundos derramaba por tu partida, nuevamente.
Y pensar que falta solo un mes para que cumplas 7 años en el cielo. Y parecen solo haber pasado días... porque te extraño tanto como el primer día sin ti.
Difícil de explicar, pero aún lo recuerdo y mi corazón vuelve a latir a mil por hora pensando que esta vez sí sería para siempre. Luego le dije sin parar: "Pero ahora sí es cierto? Ahora sí estás aquí para quedarte?". Te quedaste callado y miraste a un lado sin decirme nada. Fue como si todo se hubiese transformado en una amarga y oscura pesadilla. Cuestioné una vez más porque venías y te ibas así como si nada, porque no de una vez por todas decidías a donde pertenecer. Me molesté, lloré y grite mientras tú te ibas. Mientras tanto, despertaba a otra realidad con las mismas lágrimas que hacía segundos derramaba por tu partida, nuevamente.
Y pensar que falta solo un mes para que cumplas 7 años en el cielo. Y parecen solo haber pasado días... porque te extraño tanto como el primer día sin ti.
3 comentarios:
Hay sueños tan vividos; hace pco tuve uno así, donde nos visitan los que ya no están y a pesar de los años transcurridos sigue ardiendo unnpoquito su recuerdo
Besos
Sin darte cuenta lo estás llamando con el pensamiento.
Que fuerte lo que cuentas. Desde donde esté tu padre esta muy presente en tu vida.
Saludos.
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