Lo que hay en un rincón de mi mente

Tengo el orgullo de poder decir que la persona más importante en mi vida fue un verdadero heroe.
Un hombre que con cada palabra, me enseñó a ser lo que soy ahora.
Un hombre que por 65 años, se dedicó a vivir sus sueños y a hacerlos realidad.
Un hombre por el que yo daría la vida.
Un hombre que aunque ya no esté conmigo, en este mundo, lo está a cada minuto en mi corazón,
en mi mente, en mi alma.
Un hombre al que le dedico este blog.
Un hombre al que yo prefiero decirle papá...

27.6.12

¿Tanto tiempo ya?

Es en estos momentos donde me provoca bajar de la cama y caminar con medias sintiendo el piso helado en cada uno de mis deditos. Bajar las escaleras por el lado izquierdo, ese lado que estrategicamente bauticé como "el lado silencioso", pues no se escucha el "crunchi crunch" que hacen todas las típicas escaleras de madera. Abrir la refri y meterme de cuerpo entero a investigar. Cerrarla sin hacer ruido y verte parado como maniquí en el marco de la cocina con cara de "te ampayé con las manos en la masa". O las manos en el postre, o en la torta, o dependiendo de lo que sea que hayan visto mis ojos en esas frías noches de invierno que el cuerpo pide dulce y nada más que dulce. Regresar con el rabo entre las piernas y subir uno a uno los escalones con la cabeza gacha, contigo detrás, hasta llegar a mi cuarto y meterme nuevamente entre las sábanas. Taparme hasta el cuello, escuchar tus pasos alejarse hasta convertirse en solo eco y escuchar el crujir de tu cama. Pensar solo por un segundo, mirar el techo y pararme nuevamente en medias para dirigirme a tu cuarto. 

Es en estos momentos donde me provoca acercarme a tu cuarto, darte un besito en el cachete sin importar que estés dormido y decirte solo "hasta mañana". Aunque no sepamos a ciencia cierta, si es que habrá realmente un "mañana". 

 Hace 3 años y 9 meses 
 que no te digo hasta mañana, 
 con un besito en el cachete del lunar.

14 comentarios:

ludobit dijo...

esos gustitos a deshoras son tan deliciosos...
un abrazote, marite

Elmo Nofeo dijo...

Ah, también habías sido ladrona de refrigeradoras.

Darío dijo...

No resignarse a perder ciertos placeres cotidianos...

Hasta en el último rincón dijo...

Ludobit, deliciosos pero super engordantes! jajajaja
Beso!

Elmo, ladronaza!!!
:)

Darío, no me resignaré...
Un beso!

la MaLquEridA dijo...

Tienes tan vivo el recuerdo que puedo verte bajando las escaleras con tu relato.

A veces me haces suspirar porque me hubiera gustado tener un padre así pero bueno así es la vida.


Besos.

Hasta en el último rincón dijo...

Malque, así es la vida como dices. Pero seguro tú tienes a alguien que también me haría suspirar a mí también.

Un beso!

DRACO dijo...

antes te leí sobre que te gustaba "robar" tofees y ahora dulces en la nevera, creo que has visto mucho el correcaminos y que te excita pensar que te pueden encontrar con las "manos en la masa", jajajajaja.
un beso.

Hasta en el último rincón dijo...

Draco! Gracias por hacerme reír para cerrar mi día con broche de oro!
Beso!

[Maxwell] dijo...

Siempre recordaras los "27'S" y como siempre robando jejeje, ahora que robarás en la oficina.

Hasta en el último rincón dijo...

Maxwell, en la oficina???? ahí nada, solo en la refri! jajajaja
Beso!

Mina Treintañera dijo...

Qué rico era asaltar la refri por la noche, más rico porque nadie se enteró. Me imagino que él se las sabría todas, porque también pillaría tortita a escondidas.

Beso!!!

Hasta en el último rincón dijo...

Uy! Lenyis, él era el que más encontraba los dulces y arrasaba con todo! Hasta con lo q no era para él! jajaja

Un besote!!!

Jo dijo...

ya que lo estes considerando.... bueno ah que esperas...

Hasta en el último rincón dijo...

Jo, espero mmmm solo espero :) cuando llegue el momento, llegará.
Un beso!

El heroe de mi vida