No solo tengo hace días en la cabeza la frasecita famosa "qué me pongo". La acompañan también las pesadas "que nervios" y el "ojala que todo salga bien". Creo que estas preguntas, y más, son típicas cuando se aproxima un evento importante. Mi pedida de mano formal. Pero digo que no solo es la frase... hay algo más que no puedo sacarme de la cabeza. Pero no lo saco porque aun no sé lo que es. Solamente sé que siento que debo, necesito y quiero decir algo que tengo guardado, pero aun no descubro qué.
Solo un día en la vida se le dice que sí a la persona que más amas en el mundo, por eso tiene que ser un día "especialmente especial". Y ese solo día quiero que sea distinto. Por eso el afán de verme linda en una ropita linda y con un peinadito lindo. Mis suegritos vienen a la casa y mi mami ya está como loca viendo qué preparar el sábado. Todo parece tan irreal...
El sueño se casarme se va tangilizando papi. Pero lo veo a la vez como una situación que me quita el aliento. Cómo no va a estar mi papá a mi lado para cuando me "pidan la mano"? Hasta hoy sigo sin creerlo. El día que tanto temí por creer que no lo podría superar, se acerca. Ese día que hace casi 2 años lo vi como demasiado lejando para preocuparme por eso, está solo a unas cuantas horas. No hablo de ese día en el que entraré a la iglesia, sino del día que mis hermanas pudieron abrazarte y recibir tu bendición cuando mis cuñas estuvieron en una situación parecida a la que estará Lalo el sábado.
Mi mami y mis hermanos estarán aquí para conocer a mi futura familia, pero no estarás tú.
No escucharé tu voz, ni sentiré tus manos tímidas y temblorosas por ver que la más chiquitita de la familia se va.
No podré oler ese rico olorcito a papá que siempre se siente cuando uno tiene cerca a sus papás.
No te veré y eso es lo que más me irrita y por fin lo descubro. por fin descubro que es esto lo que me tenía rara toda la semana. Esa sensación de tener algo que no te deja tranquilo el cerebro y como un taladro perfora más y más los pensamientos, es esto que pienso ahora. No te veré el día de mi pedida y recién caigo en cuenta.
No tendré un arreglo de flores que diga: hijita te amamos mucho y te deseamos lo mejor del mundo en esta nueva etapa de tu vida. Tu mami y tu papi... y recién lo pienso.
No sonará "CLIN" cuando brinde contigo porque no estarás ahí para chocar mi copa con la tuya y hoy me doy cuenta.
No le darás la mano a mi compañero de vida ni le dirás al oído "cuida a mi bebita porque sino..." y me mirarás con ojos de puro amor y correré a abrazarte y no lo pensé antes.
No estarás conmigo y no lo puedo imaginar.
No estarás presente en cuerpo, como muchos dicen para calmarme sin darse cuenta que me irrita más.
No te tendré a mi lado y es lo me llena de rabia cuando debería estar contenta por el momento que vivo ahora!!!
Lo tuve tan presente en mi subconsciente inconsciente que no logré exteriorizarlo ni un ápice.
Pensé tanto que no quería pensarlo que finalmente lo pensé sin pensarlo mucho.
No estarás a mi lado pero quisiera sentirte a mi lado.
Como antes...
1 comentario:
Felicitaciones!
algunos (nomás) tienen finales felices...
Yo tampoco voy a estar.
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