Me trajiste un MONO!
Así es. Durante tu viaje a la selva no se te ocurrió un mejor
regalo que traerme un mono. La colita enroscadita y los ojos saltones son las características
que más recuerdo. Era un Titi. A mí me encantó desde que lo vi. Pero parecía no
querer jugar conmigo. Un animal salvaje no acostumbra jugar con pelotitas ni mucho
menos.
Obviamente mi mami casi se infarta y todos en la casa se
volvieron locos con el animalito, que claramente, no podría quedarse con
nosotros. Estuvo unos días viviendo en la casa de mis abues. Lo que ahora es mi
humilde nidito de amor, remodelado. Ahí mi abuelito Daniel, estaba feliz. Creo
que si de alguien heredé el amor por los animales es de mi abuelito Daniel. No
podía ni siquiera matar a un chanchito de tierra porque estaba cometiendo un
crimen. Pero las moscas tenían que huir de él. A veces nos sorprendía dando una
palmada en el aire o agarrando la nada con la mano derecha, una sacudida como
moviendo una maraca invisible y abría rápidamente la mano hacia arriba. A veces
veíamos salir volando una mosquita mareada y a veces caía al suelo. El mismo
que le enseñó a hablar a Cuki (el loro que me trajiste de otro viaje). Me
acuerdo que le enseñó más de 100 palabras y no dijo ni una sola mientras estuvo
en la casa. Puede que Jerry (el que seguro te acompaña ahora allá arriba) con
sus ladridos y muelas peladas lo hayan asustado. Pues cuando llegó a la casa de
mi tía Mary, Cuki milagrosamente empezó a hablar como Mario Vargas Llosa y
hasta con lisuras incluidas. Lo máximo.
Estuvo en su casa unos días. Mi mamá no soportaba la idea de
pensar que ese animalito podía tener piojos o algo parecido. Y a pesar de
haberle dicho que lo llevaríamos al veterinario y que tendría todo en orden me
hizo entender que no debía estar en una jaula sino en un ambiente libre. Tú
también te diste cuenta de ello. Por eso, qué mejor lugar que el jardín de la
casa de Evita! La vecina a la que le calculé 100 años antes su pregunta “cuántos años crees que tengo hijita”. Su
casa tenía un jardín que parecía un jungla en todo el sentido de la palabra. Nunca
conocí más allá del primer arbolito de la puerta, pensaba que me encontraría
con arañas gigantes o algo parecido. Ahí el mono tuvo una vida feliz. Comiendo plátanos
y paseándose por los árboles como se le antojara. Yo me quedé sin animalito una
vez más. Pero después llegaría Jerry. Para morder zapatos y pantalones de los
amigos de David, y blusas y tacos de amigas de Karina y Lissy. Y bueno, para
morder también los potos de algunas amigas mías.
Con este recuerdo una vez más miro al cielo y le doy gracias
al universo por haberme dado un papá como tú. Que hasta estando lejos de mí, me
siguen mandando flashes mentales para sonreír.
Para recordarme cuantas cosas viví al lado de quien por
tanto tiempo llamé “papi” a pesar de ser una viejonaza.
Para levantarme el ánimo cada vez que miro al suelo.
Para hacerme pensar en monitos marinos.. literalmente.
12 comentarios:
Aaaaaaaaahhhhhhhhhh ya ves!!! Lo sabía, carijo me tuviste estos días buscando cuántas patas tienen los monos, hasta dudé!
Qué lindo tu papi siempre, cual niño haciendo sus travesuras para hacerte sonreír, y por lo visto tu mami era la que ponía el orden en casa :0)
Esos monitos son bellos, hace mucho mi mami se trajo uno también, pero no para nosotros, sino para un ex que tuve que se encaprichó con uno de esos animalitos, no entendía el huevas que esos monitos necesitan su espacio y libertad para ser felices.
Acabo de llegar de Las Palmas, con todo y mis pepas me di una mareada bravaza y estoy verde no sabes. Encima las pastillas me hicieron efecto casi al llegar a Tenerife y ahora estoy re high, tecleo por inercia..
Besooooo!!!! Te quiero mucho!
"Lo sospeché desde un principio" jeje.
¡un mono!, ¡increíble!, je. un beso.
Se me hacía muy obvio que fuera un mono, además de peligroso.
GUAU que chevere! un Titi! no acerté u.u
Y que fue con el mono, donde fue a parar?
lo maximo.. muy lindoo :)
un monito! mi primo tenia uno pero q era mas renegon y antisocial y le gustaba morder dedos. tambien de la selva y una caja me trajeron un lorito q luego de q muriera jure no querer mas mascotas... y ahora muchos años despues, tengo 3 perritas, y yo feliz :)
un beso, marite
Siempre estupenda amiga.
Saludos y buen domingo.
adiviné!
Lenyis, tú adivinaste a la primerísima! Y tienes toda la razón, mi papi siempre buscando al manera de hacerme feliz. Y sonreír siempre siempre.
Un beso!!! Espero que la hayas pasado genial en tus vacaciones con la familia!!!
TQM!
Paty, es que no quería hacerla tan obvia ni tan difícil... jejeje Pero veo que resultó re fácil! jajaja
Draco, sí un monito!!! A mí me encantaba, pero mi mamá estaba un poco incómoda con su presencia jajaja
Elmo, ayyyyy qué geniooooo...
Beso!
Maxwell, sí era chiquitito y juguetón! Pero tb renegón! Se fue a la casa de una tía que tenía un jardín grande y bonito!
Beso!
Mel, gracias por visitarme!!! Te leeré ya mismo!
Beso!
Ludobit, a mí tb mi papá una vez me trajo un lorito!!! Y sí, este mono tb era renegón! jajaja
Un beso!
Hiperión, gracias!!! Espero que hayas pasado un buen fin tú también!
Beso!
Marcelo, así es querido... ganaste justo a Lenya!
Besooooooo!
Un monito?! aawww... siempre quise un mono tití. Creo qeu porque mi primo decía que yo parecía un mono tití entonces como que me identificaba :P
Así es Dani, un moniiiito! ME acuerdo y me provoca tener uno!!! jejeje
Beso!
Publicar un comentario