Eso de querer retroceder el tiempo para hacerte una sola pregunta o decirte solo una cosa, es mentira. La verdad es que si tuviera la oportunidad de estar contigo solo un minuto, no podría ordenar mis ideas. Una avalancha de impulsivos pensamientos, torpes reacciones, enredadas frases y una mezcla de sentimientos aflorarían como si fuera un sueño totalmente bizarro.
Hace dos noches no duermo casi nada. Me tiro a la cama, me tapo hasta el cuello, meto mis manos debajo de mis piernas y ahí me quedo. Horas de horas estancada en un grandísimo signo de interrogación invisible que no hace más que recordarme lo perdida que estoy.
Ese estado casi vegetativo, queriéndo parecer dormida pero maquinando a mil por hora pensando todo lo que podrías decirme si estuvieras aquí, me llega a chocar un poco después de todo. Y me choca porque no encuentro la respuesta a lo que necesito.
Necesito esa dosis de "no se qué" que nunca me faltaba contigo a mi lado. Esa miradita que aunque a veces era muda y hasta iba acompañada de uno de tus cariñitos doloroso como "el come rollo", me hacía entender lo que a simple vista me parecía ilógico. Lo que hasta hacía segundos no tenía escapatoria alguna.
Necesito uno de esos consejos indirectos, interrumpido por un sonido lejano de bolsita de caramelo, que terminaba en un tierno "¿quieres?" seguido de un "es que tengo que ver si están envenenados hijita".
No sé qué harías tú en mi lugar ni tampoco sabré qué piensas que sea lo correcto. Pero tal vez lo que busco hace dos noches es eso. Busco ese gesto tuyo en mi banco de memoria que me ayude a redibujar esa mirada en mi mente ahora. Que haga las veces de actor de mi película de corto presupuesto. Que me ayude a mandar a la misma mierda lo que solo me hace más daño. Lo que no me deja avanzar.
... en fin... puedo decir que mi vida ya no es la misma desde hace un tiempo, pero también es cierto que debería ser más fuerte y no dejar que las malas rachas afecten mi "loca estabilidad inestable". Pero lamentablemente, debo reconocer que después de muchas batallas perdidas, logré volver mi blando cascarón en un fuerte caparazón de acero...
pero mi alma...
esa sigue siendo de algodón...
3 comentarios:
Reina qué lindooo .....!!!
Este me encanta!
Echaba de menos leerte Maritè... pèsimo feriado te cuento,pèsimo,salvo por algo...
Espero estes mejor...jodido no? cuando no tienes lo q quieres o estas en esa etapa de "estabilidad inestable" el dilema de convertirse totalmente en piedra...pero ay q dificil! ademas tampoco seriamos felices asi...
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