Lo que hay en un rincón de mi mente

Tengo el orgullo de poder decir que la persona más importante en mi vida fue un verdadero heroe.
Un hombre que con cada palabra, me enseñó a ser lo que soy ahora.
Un hombre que por 65 años, se dedicó a vivir sus sueños y a hacerlos realidad.
Un hombre por el que yo daría la vida.
Un hombre que aunque ya no esté conmigo, en este mundo, lo está a cada minuto en mi corazón,
en mi mente, en mi alma.
Un hombre al que le dedico este blog.
Un hombre al que yo prefiero decirle papá...

28.12.10

Luces en el cielo

Hoy me puse a pensar en las miles de veces que pasamos año nuevo juntos. Fueron las mejores bienvenidas a los años que ahora son viejos, pero en ese momento, eran grandes incógnitas llenas de predicciones en la tele chicha, preguntas sin respuestas, deseos a ojos cerrados y miles de cábalas que a veces se hacían solo por gracia.

Recuerdo las veces que fuimos a Punta Lobos. El único campamento al que me dejaste ir en toda mi vida. Estar en esa playa rodeada de cerros con un olor a familia único que jamás volví a sentir en otro lugar, me hace pensar en las risas y los juegos típicos de la playa. Los castillos de arena y huecos enormes que insistentemente te pedía casi como si fuera un regalo más de Navidad. Cuando terminabas el gran hoyo, me decías que me metiera en él. Yo, con miedo, no lo hacía a pesar de tu insistencia, pero solo me bastó agarar tu mano y sentirme en total confianza. Pensar en Punta Lobos en año nuevo, me trae un sabor a la boca. Y por pensar en ello, ayer por la noche le preparé a Lalo un rico pan con huevo duro y mayonesa, por los recuerdos en la playa preferida de mi papi. Por tus lindos recuerdos en familia.

Más adelante, cuando ya estaba un poco más grande y mis hermanos ya podían pasar el año nuevo donde más quisieran, yo me iba contigo y mi mami a la casa de mi Tía Mary. Los primeros años era en Maranga, y luego en el Sol de la Molina. En estas fiestas muy pequeñitas la comida, el brindis, las cábalas y los grandes muñecos de trapo que hacíamos para quemar el año que se iba aun están grabados en mi mente como si hubiera sido hace solo unos años.

Los cohetones y demás siempre me molestaron. Desde muy chiquita la frase típica "por qué no pueden dejar de tirar esas cosas" fue mi pan de cada día por esas fechas. Me daba miedo que te pasara lo mismo que a mi abuelito Daniel, que cuando prendió la sarta de los típicos cohetecillos rojos y verdes, en lugar de guardarse en el bolsillo del pantalón el encendedor, se guardó la sarta y empezaron a reventar uno tras otro con él corriendo y riéndose con mis hermanos de tan graciosa escena.

Me acuerdo que como los fuegos artificiales y pirotécnias no eran muy de mi agrado, para enseñarme un poco de la adrenalina que tú sentías como cuando lanzabas las bombas desde los aviones que volabas me llevabas afuera de la casa antes de las 12, abrías tu maletera y sacabas una pistola rara. No era la común pistola que llevabas siempre bajo el asiento sino una con un cañón más gordo. Me mirabas, apuntabas al cielo y me decías: de qué color quieres que se ponga el cielo?. Mi respuesta duraba segundos y casi al instante que mi boca se cerraba: BOOOOM! El cielo se tornaba del color que yo mencioné.

No sé cómo hacías para que siempre coincidiera el color que te pedía con la belgala que tenías cargada.
Si hoy pudiera conseguir una pistola así, lanzaría una bengala al cielo por ti.
Para que veas desde arriba que estamos celebrando el fin de año contigo.
Aunque ya no estés con nosotros.

5 comentarios:

Mr.d dijo...

Conmovedor. Un puzzle sin piezas completas no es puzzle. Una vida sin un padre no es igual pero cuando los recuerdos abordan lo mejor que podemos hacer es cogerlos fuerte. Del cuello como tomando a tu papi. Sonriendo pausadamente cerrando los ojos. No todas las ausencias son insuperables. Tienes una familia, un novio y amigos, como yo.
Un fuerte abrazo. Limpieze esa lágrima sin roche Marité.

Bren dijo...

Disculpame Marité pero No pude evitar reirme a carcajadas imaginando a tu abu guardando la sarta de cohetecillos prendidos en el bolsillo de su pantalon, aaun me sigo riendo :/ sorry por otro lindos recuerdos sobretodo los del campamento familiar y la magia que hacia tu papi al disparar esa pistola de luces acertando con el color que tu querías...sin duda El estará con ustedes recibiendo el 2011 ya te dije personas como El no mueren viven siempre en los corazones de quienes como tu jamas dejaran de amarlo y recordarlo,un abrazo y gracias por tus lindas palabras en mi blog,FELIZ 2011 Y QUE EL CIELO SE ILUMINE PARA TI CON SU SONRISA :)

Bren dijo...

(despues del sorry quise poner "por otro lado"...

Anónimo dijo...

La luz que brillará en el cielo, este y todos los años será la de nuestro amor, será tan intensa que iluminará los corazones de todos los seres que amamos y que dieron el primer paso a la felicidad eterna. Te amo Enanita!!!

Hasta en el último rincón dijo...

No es bello mi novio???
Gracias por todo lo que me dicen. Y sí Bren, es inevitable no reirse horas con lo de mi abuelo. Imagínate a mis hermanos como se rien cuando lo recuerdan...

El heroe de mi vida