Lo que hay en un rincón de mi mente

Tengo el orgullo de poder decir que la persona más importante en mi vida fue un verdadero heroe.
Un hombre que con cada palabra, me enseñó a ser lo que soy ahora.
Un hombre que por 65 años, se dedicó a vivir sus sueños y a hacerlos realidad.
Un hombre por el que yo daría la vida.
Un hombre que aunque ya no esté conmigo, en este mundo, lo está a cada minuto en mi corazón,
en mi mente, en mi alma.
Un hombre al que le dedico este blog.
Un hombre al que yo prefiero decirle papá...

17.3.11

Cómo es la vida no?

Recuerdo el día en que llegué de mi sustentación de tesis y tenía un enorme arreglo de rosas en el piano de la casa. No te voy a mentir. No te voy a decir que me emocioné al verlo porque grande fue mi decepción al darme cuenta que eran "de mi papá" y no de otra persona que pensé que se acordaría que ese día era mi cumpleaños y el gran día en el que pasaría de ser una simple bachiller a una licenciada. Con el perdón de mi queridísimo novio al que amo y adoro que seguro pondrá cara de haber chupado limón cuando lo lea, pero fue así.

Luego de leer la tarjetita, escrita con esa letra tan tuya, corrida y con elegantes curvas en las "l" y las "a" por ejemplo, la guardé en mi bolsillito de la cartera y te dije solo un "gracias papi que lindo". Pero la pequeña espinita en mi corazón no me dejó leer de verdad, con los ojos de adentro, lo que me habías escrito. Y ahora, me pongo a pensar en cómo es la vida, tal vez de injusta, que no me enseñó antes a valorar y leer de forma distinta muchas señales que me pusieron en el camino. Como ese detalle por ejemplo.

Yo, con el rabo entre las piernas pensando que hubiera sido el día más feliz de mi vida si es que esas flores eran de otra persona, si es que esa tarjeta era escrita por la mano de otro autor, y si ese mismo día en la noche que irían a verme mis amigos cuando me preguntaran de quién era ese arreglo tan lindo la respuesta no hubiera sido "de mi papá", ahora miro mis manos como si fueran un espejo de mis recuerdos y me doy tanta cólera que prefiero bajar las palmas y ocultarme en la sombra.

Cada día entiendo más este "proceso" de vivir reviviendo recuerdos. Es la mejor manera de darse con una piedra en el pecho y darse cuenta de que los errores cometidos no pueden ser hilvanados por una mágica soguilla pegalo todo. Esos huecos quedarán por siempre en mi corazón pero con el alivio de saber que tú me conocías tanto que querías verme feliz aunque sea por unos segundos. Aunque sea en el tramo de la puerta a las flores hasta que cogiera la tarjetita con una sola ilusión que desaparecería en ese preciso instante. Al menos me viste con una sonrisa ese día de doble celebración.

Guardé ese recuerdo en mi mente y en mi billetera desde el 21 de mayo de 2008. En otra billetera ahora y en otra situación sentimental te doy las gracias por haberme dejado esas palabras que no solo quedaron en mis oídos sino también en un papel para leerlas y releerlas cada vez que quiera saber qué es lo que soy y cuánto valgo. Cada vez que quiera saber el orgullo que sentiste por mí y aunque en ese momento en que leí lo que escribiste no notaste el pálpito apresurado que solo da el corazón cuando se emociona, me llenó de vida en serio.

Quién diría que ese fue el último arreglo de flores que me enviaste y la última frase que me escribiste.
Cómo es la vida que cuando tomé la tarjeta, me dije a mí misma que la guardaría por una razón desconocida para mí en ese entonces. Teniendo en cuenta que muchas otras notitas, papelitos y demás habían terminado refundidas por ahí total "tenía papá para muchos años más" o al menos así lo creía. Pero cuando leí ese en especial, fue distinto.

Cómo es la vida...
Que aunque no lo sepas, te hace actuar de maneras inexplicables que luego, te enseñarán mucho.

3 comentarios:

Bren dijo...

Es verdad, como es la vida...que tu post me hace pensar en que debo valorar mas las cosas que vienen de mis padres incluso amistades,antes de desilusionarme pensando q hubiera sido perfecto si venía de otra persona...persona q como te das cuenta ya no significa hoy nada en tu vida...
Lo bueno q conservaste la tarjetita :)
Besos!

Mr.d dijo...

Hola Maritè lamento no haber visitado y leido màs seguido el blog. Ando en una burbuja de tiempo y problemas. Como puede cambiar un camino cuando parece ser recto y largo que de pronto se bifurca y te detiene sin saber por donde ir. Eso me pasa ahora. Espero puedas entenderme.
SIgue asì, alimentando con tu motivaciòn a todos quienes pasean por tu blog. Cuidate un abrazo.

Hasta en el último rincón dijo...

Mis dos amigos bloggeros... Qué sería de este blog sin ustedes! La verdad es que Mr.D. se ha perdido un poco del mapa pero Bren y yo tenemos esperanzas que descuelgue la pluma que colgó hace unas semanas y vuelva al mundo bloggero.

Un beso enorme para los dos, y de verdad, la mera merita... no sería lo mismo escribir sin leer sus comentarios.

Les digo GRACIAS desde mi último rincón!

El heroe de mi vida