El año pasado

Maria Paz y Daniela van a hacer su Primera Comunión 1 día antes de tu cumpleaños, y David y yo seremos padrino y madrina. David de Maria Paz y yo de Daniela. Ya te imaginarás lo emocionadas que están. Más que todo creo que quieren intercambiar estapitas con sus amigos.

El año pasado me acuerdo que Juan Diego también me eligió de madrina, y fue justo el día de tu santo, el 13 de septiembre. Lissy organizó un almuerzo en su casa con toda la familia. Comida criolla como a ti te gustaba, aunque yo renegara, en el fondo me encantaba verte contento. En fin, tú decías que era la Primera Comunión de Juan Diego y no tu cumple. Cómo odiabas tu cumple! Ya recién ahora me enteré la verdadera razón por la que tanto te llegaba que te saluden y te regalen cosas... No te preocupes, tu secreto aun no será revelado papi. Está a salvo conmigo, aunque debo reconocer que me dió mucha risa cuando mi abuelita me contó.

Macarena es otro tema, no sabes lo grande que está. En el nido ya tiene amiguitos, y también enemiguitos (por llamarlos de alguna manera sutil). Es un loro y hace locura y media desde que amanece. Los sábados, que siguen siendo tradición en la casa, ella es el centro de atención con sus miles de shows inventados.

Cada vez que pienso en los bebes, y en lo rápido que crecieron no puedo evitar ponerme triste. Y preguntarle a todo el que me escucha allá arriba, por qué te tuviste que ir antes de conocer a mis hijos, a los hijos de David... Por qué no tuve la misma suerte de mis hermanas que estuvieron de tu mano justo el día que se casaron... Por qué no pude tenerte más tiempo a mi lado y ver como tu pelo se volvía blanco y caminabas de la mano agarrado de mi mami hasta viejitos...

Pero la vida es así... Es algo que me enseñaste incluso cuando ya no estabas conmigo. Uno nunca puede esperar sentado a que algo pase, sino tiene que vivir cada día su vida como si fuera el último.

Estoy segura que así la viviste tú.

Por eso que el último día de tu vida lo viviste en el lugar que más te hacía feliz; haciendo lo que te daba la fuerza para seguir adelante siendo la mejor persona del mundo, de mí mundo. 

Lo hiciste volando alto.

Fue así como llegaste hasta el cielo.